Las habitaciones amplias y limpias, excelente servicio.

Pide una habitación con vista al jardín para una sensación de tranquilidad y desconexión durante tu estancia.

Sin tonterías, aquí va la verdad

Recientemente disfruté de una estancia maravillosa en un hotel de lujo. Las habitaciones son un verdadero refugio, con amplios balcones y vistas impresionantes al mar Mediterráneo. La atención del personal fue excepcional, siempre dispuestos a hacer de mi visita algo especial. La zona de la piscina fue perfecta para relajarme. Sin duda, una experiencia que no olvidaré.

La atención del personal fue maravillosa, hicieron que celebráramos un cumpleaños con una sorpresa especial. La habitación tenía vista al jardín, lo que nos brindó una agradable sensación de tranquilidad.

pues no puedo decir que no me recibió un acogedor bigote, pero el trato fue totalmente vejatorio. mi habitación parecía competir en limpieza con el fondo del océano. después de todo eso, esperaba un gesto de cortesía como una mejora de habitación, pero supongo que eso es pedir demasiado aquí. decepcionante es poco.

Las habitaciones son amplias y cómodas, y la comida es buena, aunque los postres son un poco escasos. El personal muy amable, especialmente Iman, que nos hizo un tour genial por el hotel.

Eso sí, si esperas una decoración de habitación, no será el caso, ¡parecía que usaron el presupuesto para comprar cockteles en vez de globos!

La piscina es un gran lugar para relajarse y disfrutar. Las sillas de la zona de comedor tienen un aspecto descuidado, lo que afecta la experiencia general. Hay actividades nocturnas interesantes como música en vivo, ideal para familias. Las habitaciones son amplias con bonitos balcones.

grata sorpresa pero con detalles a mejorar

La habitación fue realmente espectacular, con un balcón que ofrecía vistas al jardín. La comida, especialmente las pizzas y tortillas, estuvo a la altura de mis expectativas. me encantó la zona de la piscina, un lugar perfecto para relajarse después de un día de exploración.

Sin embargo, el acceso a la playa privada podría mejorarse, ya que la caminata es un poco larga.

Las habitaciones son espaciosas, con decoración moderna y balcón que ofrece vistas agradables. La zona de la piscina es amplia, con suficiente espacio para relajarse bajo el sol.

Tuve problemas con las habitaciones sucias que no estaban preparadas adecuadamente. La comida era decepcionante, con poca variedad y no suficiente para todos los huéspedes, lo que hace que uno se sienta como si estuviera compitiendo para conseguir algo. Además, la animación en el hotel era prácticamente inexistente, solo música de bares marroquíes que no resulta muy entretenida.

estuve 2 noches en el radisson blu y la experiencia fue super buena. la habitación era espaciosa, con un balcón y decoración q me encantó. el personal era bien amable y la comida en el bar estaba buena, además la vista es genial.

pero la ubicación está un poco lejos del centro y algunos del staff necesitan un poco más de entrenamiento.

Una estadía agradable con detalles a mejorar

Pasamos tres noches en una habitación espaciosa y cómoda. La piscina era un excelente lugar para relajarse después de un día explorando la zona. Sugiero que combinen comidas más variadas en el todo incluido y que amplíen los horarios de la terraza de la playa para disfrutar mejor. La atención del personal fue buena, aunque con algunos detalles que ajustar.

Os recomiendo este fantástico lugar para un viaje rápido

Habitaciones amplias, ambiente relajante, la comida que probé estaba bien, especialmente las pizzas que son deliciosas y la zona de la piscina es un lugar perfecto para descansar después de una jornada explorando la ciudad, que está a solo 7 km del hotel.

Casi perfecto

Bonita experiencia con algunos fallos

Estuvimos dos noches en una habitación con balcón y la verdad que el sitio es lindo. Me encantó que nos recibieran con una decoración especial en la habitación. El personal es genial, aunque algunos necesitan un poco más de entrenamiento. La comida en el bar estaba buena, pero la localización es un poco lejana del centro. Perfecto si buscas tranquilidad.

Me quedé en el radisson blu y la experiencia fue muy buena. La comida era bastante buena y hay un personal amable que realmente se preocupa por los huéspedes. Iman, la chica de relaciones públicas, fue fenomenal, nos hizo un tour y estuvo disponible para cualquier duda. Las habitaciones son amplias y tienen ese toque de lujo que las hace cómodas. Además, el hotel está cerca de la playa Sfiha.

100% recomendable.